Mercado de las cebollas frescas.
En el mundo se cultivaron 3 millones de hectáreas con cebollas durante el año 2004 y se produjeron 55 millones de toneladas (FAOSTAT). De la producción mundial, China representó el 33%; la UE, el 9%; los Estados Unidos, el 7%, y América del Sur, el 6,5% Las exportaciones mundiales durante el año 2003 alcanzaron a 4,7 millones de toneladas, por un valor de 1.084 millones de dólares. Los principales exportadores fueron: India, con el 18% del volumen; Holanda (17%), China (10%) y Estados Unidos (7%). Argentina ocupa el séptimo lugar, con un 4%, y Chile es decimoséptimo, con 1%. En Chile se estimó para la temporada 2003/04 una superficie de 5.000 hectáreas cultivadas con cebolla de guarda y 2.500 hectáreas con variedades tempranas y de media estación, lo que permite estimar una producción de 200.000 toneladas de la primera y 87.500 toneladas de las demás. El mercado fresco es el principal destino de este producto, pero el 43% de la producción de cebolla de guarda es exportado (considerando el volumen enviado al exterior en el año 2004). Las fluctuaciones y ciclos productivos continúan siendo las principales características del mercado interno de la cebolla, lo que se traduce en importantes variaciones de precios entre temporadas (como se ve en el gráfico 1), un alto grado de informalidad y condiciones poco claras en la comercialización. La mayor parte de los mayoristas, supermercados o exportadores operan con un número estable de productores conocidos y confiables y sobre este piso realizan negocios con otros, disminuyendo así el riesgo de no cumplimiento de las condiciones establecidas. En los mercados externos también existe variabilidad en los precios entre temporadas, e incluso cambios en las características del producto exigido. Así, por ejemplo, según las condiciones del mercado, hay temporadas en las que se piden calibres de cierto tamaño y no menores, y en otras, de menor oferta y precios más altos, se compran incluso los calibres más pequeños. El mercado interno es muy competitivo a nivel de agricultores, debido al alto número de oferentes del producto. Según el Censo Agropecuario, en el año 1997 hubo 3.639 explotaciones que cultivaron cebolla de guarda y 1.419, cebolla temprana. La venta por supermercados también representa un canal donde se produce mucha competencia por entrar y donde son pocos los productores que pueden cumplir las exigencias que se imponen. Los agricultores señalan que las principales barreras para convertirse en proveedor estable de supermercados son la capacidad financiera (debido a los pagos a 90 o más días), la capacidad operativa para cumplir volúmenes y fechas, y la preferencia de los supermercados por tener proveedores de una gama amplia de productos. Otro factor importante son los altos niveles de calidad exigidos, que, según los productores, pueden ser incluso mayores que los de la exportación. El año 2004 se caracterizó por altos precios en el mercado interno y un crecimiento en las exportaciones, lo que indujo un aumento en la superficie cultivada para la temporada 2004/05. Esto, junto a una disminución de las exportaciones durante el año 2005, hizo aumentar la oferta interna, lo que provocó una disminución en los precios, como se observa en el gráfico 2. En septiembre se observó un alza en los precios y esta tendencia continúa en los primeros días de octubre: en Lo Valledor la caja de 20 kilos de valenciana de guarda de primera se cotizó en $2.443, y la de segunda en $2.000. Las exportaciones habían mostrado una tasa creciente en los últimos años, como se ve en la tabla 1. Sin embargo, en el período enero a agosto de 2005 diminuyeron en un 34%. Las ventas más bajas tienen relación con menores envíos a la Unión Europea, Brasil y la Argentina, como se ve en la tabla 2. Esto se debe al nivel de las ventas al exterior durante el año 2004, cuyo crecimiento tuvo gran parte de su explicación en la menor producción argentina, competidora de Chile en el mercado europeo y normal abastecedor de Brasil. Como se puede observar en la tabla, las ventas durante los ocho primeros meses de 2005 son más altas que en el año 2003, tanto a nivel global como en la mayor parte de los mercados. En el corto plazo se espera que la tendencia de alza en los precios continúe y éstos se sitúen levemente por encima de los del año 2003. Respecto a la próxima temporada, según las apreciaciones de agricultores y agentes del sector, se estima una disminución en la superficie plantada, producto de los bajos precios del presente año. Por otra parte, el clima ha atrasado los almácigos y en algunos casos ha provocado daños en ellos, lo que podría causar una escasez de plantas. De concretarse una menor producción, la consecuencia lógica es que los precios suban respecto a la temporada que termina. En relación a las posibilidades de exportación, medios e informes agrícolas europeos indican una baja en la producción española. La producción de cebollas de invierno de Valencia se habría visto afectada por heladas y, según un comunicado de los primeros días de octubre del secretario general de la Asociación de Productores-comercializadores de Cebolla de Cataluña, esta provincia habría cerrado la campaña de cebolla con un 30% menos de producción, debido a las heladas y a las condiciones de sequía que imperaron durante el período de crecimiento del bulbo. Estas primeras noticias permiten pensar en buenas posibilidades para el producto chileno; sin embargo, habrá que estar atentos a noticias de la cosecha holandesa y, especialmente, de la Argentina.
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| Format: | Artículos biblioteca |
| Language: | Español |
| Published: |
2005-10
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| Subjects: | CEBOLLA, HORTALIZAS, PRECIOS MAYORISTAS, EXPORTACIONES HORTICOLAS, |
| Online Access: | https://hdl.handle.net/20.500.12650/3315 |
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